El Arca de Noé que es una ciudad auto sostenible en el agua que puede soportar todas las especies vivientes, desde seres humanos a animales y peces, plantas y árboles, que han sido desalojados de sus tierras por desastres naturales, guerras, o cualquier otro desastre que pueda suceder.
Además de proporcionar protección frente a estos desastres, el concepto del Arca también se ocupa de la sobrepoblación en la tierra: el 72% de la superficie terrestre ya está cubierta por agua, por lo que la extensión hacia el agua de la red urbana de las ciudades es a la vez lógica y útil, además como las energías solar, eólica y de olas son fácilmente capturadas en el mar, estas fuentes de energía natural potenciarán su desarrollo.
Está diseñada como parte de una red que consta de otras Arcas, que se conectan con túneles flotantes bajo el agua y a tierra firme. A medida que los asentamientos crezcan, las arcas se pueden conectar entre sí, creando una gran parte continental artificial a partir de una serie de islas artificiales.
Un gran número de cables flexibles conectan la isla con el fondo del océano, proporcionando estabilidad, y una pared externa tan alta como 64 metros protege la isla de los fuertes vientos marinos y los tsunamis. Cuando se produzcan graves emergencias, los residentes pueden retirarse a unas burbujas dentro de las profundidades de las islas para su protección.
Debajo de la isla, grandes turbinas unidas a la parte inferior convierten las corrientes oceánicas en energía, y las capas de coral artificial de la superficie fomentan el desarrollo de nuevos ecosistemas.
Como una solución, el Arca tiene todo lo que los residentes necesitan para su comodidad: residencias, oficinas, áreas de recreación, parques, bosques y playas. También hay una reserva para animales.
El diseño es de Aleksandar Joksimovic y Jelena Nikolic de Serbia
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